Voy a comenzar por la legendaria receta del Hummus, que tantas mañanas de gloria me ha dado y que cumple la ley del máximo rendimiento con el mínimo esfuerzo.
Ingredientes:
- 1 bote de garbanzos cocidos ( no importa la marca)
- El zumo de medio limón
- 1/2 ajo
- 1 pellizco de sal
- 40 cc aceite de girasol
- 1 cucharadita (de postre) de cominos en grano
- 2 cucharadas soperas generosas de sésamo tostado
- Agua
- Aceite de oliva, pimentón y sésamo tostado para adornar
Cacharritos:
- Batidora
- Mortero
- Plato llano grande para servir
Cómo se hace:
- Poner los garbanzos lavados y escurridos en el vaso de la batidora
- Añadir el zumo de limón, el ajo picadito, la sal y el aceite de girasol
- En el mortero poner los cominos, machacar bien y añadir al vaso.
- Sin lavar el mortero poner poco a poco las dos cucharadas de sésamo y machacar hasta que se quede como pasta ( se puede añadir una cucharadita de agua para que sea más fácil), y añadir al vaso porque aunque se queda un poco grumoso no pasa nada, luego la batidora lo disuelve
- Se comienza a batir añadiendo un par de cucharadas de agua, y conforme se va haciendo la pasta se añaden cucharadas de agua hasta que la textura sea cremosa pero espesa: si se pone mucha agua al principio se puede quedar caldoso y ya no tiene arreglo. Dependiendo de la marca unos garbanzos cogen más agua que otros, pero de sabor todos los que he probado quedan muy buenos.
- Al terminar de batir probamos de sabor: al principio sabe flojo, solo se puede añadir algo más de sal si está muy soso, aunque yo recomiendo tener paciencia: en cuanto pasa un rato comienza a subir el sabor.
- Servir en un plato llano grande, haciendo una capa de unos dos centímetros de grosor y marcando una espiral con el dorso de una cuchara. Poner un hilito de aceite de oliva del rico por toda la espiral y espolvorear con sésamo tostado y un poco de pimentón.
- Servir con pan de pita, rebanadas de pan, picos, patatas fritas, nachos...
- ...y yo que estoy a dieta: hojas de endivia, palitos de zanahoria, pepino, apio...
Trampas:
- Bastante trampa es usar los garbanzos de bote, pero si hay algún cocinero excelso que use garbanzos cocidos en casa, hay que hacerlos hasta que estén tiernos y poner unos 400 gramos
- Yo, que hago esto un día sí y otro también me he vuelto vaga y compro en el herbolario un pasta de sésamo tostado muy rica que se llama tahini, así me evito un morterazo. Es parecida a la crema de cacahuete, pero más líquida, y pongo dos cucharadas soperas generosas, que ya ahorraré calorías luego con las endivias. Pero recordad: tahini de sésamo tostado, que hay otra de sésamo blanco (sin tostar) que es más insípida y no vale para esta receta.
Mmmm... Aparte de que sube el sabor hasta el texto, esta receta, y estoy seguro de que todas las demás también, no deja ningún cabo suelto. Ninguno.
ResponderEliminarMucha suerte, Pacatouille!
(joder, me encanta)
¡Lo hice! Y triunfé, aunque diría que me quedé corto de sésamo.
ResponderEliminarEl frutero marroquí de mi barrio me trajo un tupper con un cus cus buenísimo y yo se lo voy a agradecer llenando ese mismo tupper (limpio) con este hummus, que, según me dijo, no lo conocía. Problemas con el idioma, supongo.
¡Gracias!
Lo he vuelto a hacer, esta vez para impresionar a mi frutero árabe, que cuando le hablé de esta receta no supo de qué coño le estaba hablando. Y me ha pasado lo que a los grupos que tienen gran éxito de critica con el primer album y con el segundo, tras repetir formula, sacan una patrañaca. Aun así, se lo voy a llevar al frutero. Con no obligarle a probarlo delante de mí...
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