Ingredientes:
- Una lata pequeña de leche condensada
- La medida de la lata de leche normal
- 4 huevos
- Agua
- Caramelo líquido
Cacharritos:
- 1 bol grande
- 1 batidor
- 1 molde para flan que resista el calor
- 1 fuente de horno honda
- Papel de aluminio
- 1 palillo de brocheta
Cómo se hace:
- Calentar el horno a unos 200º con calor arriba y abajo
- Abrir la lata de leche condensada y verter todo el contenido en el bol
- Llenar la lata vacía de leche hasta el borde y añadirla al bol
- Comenzar a mezclar con el batidor y añadir los huevos de uno en uno hasta que sea una mezcla espumosa
- Poner caramelo líquido en el molde hasta tener cubierta toda la base
- Llenar el molde con la mezcla de leche y huevo, dejando por lo menos 3 o 4 cm hasta el borde y cubrir con papel de plata
- Colocar el molde en una bandeja de horno honda con agua para hacer el baño maría
- Meter la bandeja en el centro del horno y dejar cocer unos 50 minutos: para saber si está hecho pincharemos con un palillo de brocheta y si sale limpio ya podemos parar el horno.
- Dejar enfriar bien antes de guardar en el frigorífico
Trampas:
- Si no tenemos horno a mano se puede poner en una cacerola grande con tapa donde entre el molde del flan sin tocar con las paredes, y una vez que el agua comience a hervir se mantiene a fuego medio, añadiendo agua caliente si baja mucho el nivel
- Si tienes un jarro grande y una batidora eléctrica se puede poner los dos tipos de leche y los cuatro huevos a la vez y batirlo todo junto: se curra menos y en el resultado final yo no noto diferencia, pero hay que hacerlo con cuidado, que si coge velocidad sale disparado
- Si tenemos restos de croissants, ensaimadas y demás bollería a punto de marmolización, podemos hacer un pudding estupendo desmigándolos en una fuente alargada caramelizada y cubriéndolos con la mezcla del flan a la que habremos añadido 1/2 lata más de leche (pero para esto sí hace falta horno)
- ...y cuando no me ve nadie yo me lo sirvo con montones de nata
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